Ya hemos demostrado alguna vez que la fuerza que tiene la naturaleza es inconmensurable. Esta energía la vemos descargada en lluvias, vientos, mareas... a diario.
Este barquito se enfrenta a una ola que lo supera en altura. El barco ante este acontecimiento, se dirige a todo gas de frente para intentar sortear el obstáculo que le pone el mar.









